Buen viaje Eduardito

Al autor de La invención de la uva se lo cargó Noé en alguna borrachera. Los caminos se bifurcan y se alargan hasta perderse de vista.

Ayer llegó por el correo de las luces oscuras la noticia gris, navegada desde un mar que había perdido sus peces y el sabor del agua. La muerte siempre llega cuando no es esperada, con afán íntimo de sobresalto. Al escritor nadaísta y envigadeño se le terminaron las luces de su brújula. Eduardito Escobar se fue por el camino que nunca termino de andar. Al autor de La invención de la uva se lo cargó Noé en alguna borrachera. Los caminos se bifurcan y se alargan hasta perderse de vista. Al hombre repetidor de sus pasos por el recordado Junín, lo vimos doblar la esquina a ritmo lento de mariguano existencial y un cartapacio de libros bajo el brazo .

Juan Manuel Roca, Jota Mario Arbeláez y yo lo evocamos en una conversa en el estudio de Jota en Bogotá hace algunos años. La distancia es larga entre Lutecia y Medallo, también entre pintura y poesía. Hoy día de lluvia en el que termina el invierno europeo recuerdo la ocasión cuando Eduardito y yo visitamos a Fernando González, allá en Otraparte, la que aún llamábamos La puta mierda. Habíamos llegado al improviso con carnada de botella de guaro y al final como beduinos sedientos la despachamos en un abrir y cerrar de ojos. El maestro de la boina pegada al cuero cabelludo que ya se emborrachaba con el olor, nos insultó diciéndonos: vienen estos malparidos, se beben mi aguardiente y se comen mis mangos biches.

Ossaba, París 20 de marzo de 2024

Ossaba: artista plástico colombiano residente en Paris. Colaborador de La Pluma.

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